Ahora
que hemos entrado en el verano, viene bien recordar un personaje, que nos
acompaña en sus noches, con su trasiego depredador de insectos, junto a las
farolas del pueblo.
Reptil
denostado (saurofobia) y condenado por creencias, que no voy a comentar, no es
excesivamente popular, pero es un gran benefactor al que deberíamos de cuidar
más pues su labor de limpieza de molestos insecto es encomiable.
Cuando
de niños, en las noches de verano, nos tiraban a la dula y la distracción de
las pocas que teníamos, quizá malvada, era perseguirlas y hacerles chichinas.
Mi
apreciación es que su población esta en franco retroceso, creo que hay muchos
factores que son los causantes, entre ellos destacaré la perdida de hábitats y
el cambio de pintura en las fachadas, el abandonar la cal y la introducción de
la pintura plástica, en mi opinión, han creado un franco retroceso.
Es
un pequeño reptil que se distribuye por toda la cuenca del mediterráneo, de la
familia Gekkonidae. Es común en la Península Ibérica, excepto en la Cornisa Cantábrica.
Se
le conoce además de por buzgaño (Alcublas
(V)), por osga en Portugal, salmantesa en Galicia, prácan
en Canarias, perenquén o perinquén en
Cataluña, en Valencia y Baleares dragó o dragonet
y en Extremadura santorrostro.
Por
sus efectos benefactores ha sido introducido en Baleares, Canarias, Madeira,
Montevideo (Uruguay), Buenos Aires (Argentina) y California.
Animal
muy beneficioso, no me cansaré de repetirlo, puede alcanzar los 17 cm, su colorido cambia
según sea de día o de noche, va del gris pardo al marrón y con variantes de
gris blanquecino hasta casi negro, con manchas claras y oscuras y su vientre es
blanquecino.
Su
cuerpo es robusto y aplastado, con una cabeza triangular separada del cuerpo
por un pescuezo. Una curiosidad es que si pierde su cola se regenera, aunque ya
no tiene bultos de punta y es mas lisa. Su ojos son grandes con pupila vertical
y sin parpados, que en la oscuridad la dilata para tener una mejor visión.
Tiene la boca obtusa.
Mención
especial merecen sus dedos, verdaderas ventosas, que les permiten, incluso
poder caminar por techos y por cristales, siendo verdaderas malabaristas y con
gran rapidez de desplazamiento.
Sus hábitos son nocturnos,
también al atardecer y a veces durante el día, sobretodo en días soleados del
fin del invierno. Aunque no suele alejarse mucho de sus escondrijos, que suelen
ser edificios, ruinas, rocas y campos pedregosos, pero donde más abundan es
junto al alumbrado público.
Se alimentan
principalmente de insectos en los meses calurosos del año y a menudo se
encuentran cazando los insectos nocturnos que son atraídos por luces, lámparas,
etc.
Incuban dos huevos casi
esféricos dos veces al año, alrededor de abril y junio. Después de cuatro meses
nacen las pequeñas salamanquesas con menos de 5 mm... de longitud. Crecen
muy lentamente y viven hasta 8 años en cautividad. Comen, grillos, polillas,
moscas, mosquitas, etc. ya que son insectívoras.
Sus mayores depredadores
son los gatos domésticos en los medios urbanos y el monte la lechuza y la
culebra de herradura.
Fuentes:
Gallipato Alcublano
http://es.wikipedia.org/wiki/Tarentola_mauritanica
Salvador Viadel
Paco Micó
Rafa: yo lo voy a subrayar, es INOFENSIVO y un buen aliado para la lucha contra los insectos en nuestras casas. La mía, en el campo, está llena, y lo agradecemos.
ResponderEliminar¡Bien por el simpático "monstruito"!
Un saludo.
Este tipo de articulos que describen las virtudes de estos "Adragones" como decimos en Pedralba, son muy interesantes decir lo que hacen para que las gentes los respeten y protejan por mucha "grima" que te den como a mi.Y como bien dices, nos protegen a su manera de muchas molestias y creo que tal vez algunas enfermedades.
ResponderEliminarUn saludo, Sanmiguel.
Mi hijo y su hermana, metían algunos en casa, para q no tuviéramos mosquitos.
ResponderEliminarFuncionaba, y no molestan en absoluto