Grupo de voluntarios que cuidamos la biodiversidad de las balsas de Alcublas
miércoles, 31 de diciembre de 2014
martes, 16 de diciembre de 2014
EL TRABAJO DE CONNECTA NATURA FUNCIONÓ EN LA ACEQUIA DE LA RESERVA DE FAUNA BALSA DE LA PEDROSA EN ALCUBLAS.
Al fin llovió en Alcublas, fueron entre 80 a 100
litros, pero de una forma sosegada y tranquila.
No obstante la tierra estaba muy reseca y absorbió
mucha agua, lo que no fue excesivamente beneficioso para las balsas y navajos,
ya se sabe nunca llueve a gusto de todos.
Pero si llovió lo suficiente para mostraros, lo bien
que funcionó el trabajo realizado por CONNECTA NATURA en la Balsa de la Pedrosa.
El agua no cruzo el camino, pues las correcciones que
se hicieron en el viejo y obturado arbellón, lo impidieron.
Si que discurrió el agua por la acequia hacia su camino
final la cubeta de la balsa.
Las correcciones a los daños que causo la saca de
madera del monte, aguantaron muy bien.
El agua discurrió plácidamente por la acequia, no
rebalsándose y llegando a su destino.
El trabajo más arduo, las fajinas, cumplieron en su
misión.
Retuvieron el agua brava, laminándola, para que el
impacto fuese el menor posible.
Las diversas fajinas que se realizaron, una tras otra,
posibilitaron que el agua, depositara parte de su tierra arrastrada.
Dado la pendiente del monte, es muy importante retener
su velocidad por medio de fajinas, lo que hace que el agua baje mas mansamente
y deja parte de la tierra de arrastre en las fajinas.
Como se ha dicho el agua llego a la acequia procedente
del monte y discurrió por ella hacia su camino final.
Al ir mas mansa no afecto en exceso el cruzar el camino
que se interpone entre la balsa y la acequia.
En fin si llego el agua a la cubeta y se cumplieron los
objetivos deseados.
Agradecer también al Ayuntamiento de Alcublas las
facilidades para llevar a feliz término este trabajo.
Así como agradecer de forma especial a CONNECTA NATURA
su labor y espero no sea el último proyecto en que nos embarquemos.
J. R. Casaña
Etiquetas:
Connecta Natura,
J. R. Casaña
Ubicación:
46172 Alcublas, Valencia, España
sábado, 6 de diciembre de 2014
Ranita de San Antonio (Hyla arborea)
Las
ranitas de San Antonio son anfibios de pequeño tamaño que no suele
superar los 6 cm de longitud (58 mm en los machos y 60 mm en las hembras).
Presenta
un cuerpo ovalado, cabeza ancha y ojos grandes, prominentes de iris dorado.
Fácilmente
reconocibles por el intenso color verde brillante, aunque, dependiendo de su
entorno, son capaces de cambiar su color .. Poseen unas líneas que van del
marrón al negro dibujadas a lo largo de los costados de forma irregular y extendidas
en manchas más marrones. También presenta
franja en las patas anteriores y posteriores.
Sus
extremidades son esbeltas y los dedos (cuatro en las
patas anteriores y cinco en las posteriores con pequeña membrana interdigital
en estas últimas) con discos adhesivos adaptadas a sus hábitos trepadores que le permiten trepar por innumerables superficies.
Principalmente
les permiten subir fácilmente por la vegetación y mantenerse sobre las hojas
más lustrosas, siendo uno de los caracteres que las separan de las ranas
típicas, de fuertes ancas traseras adaptadas al salto.
La
piel es lisa y de un verde hierba en el dorso, mientras que el vientre resulta
ligeramente granuloso y de un gris pálido.
El
macho presenta un gran saco vocal que infla bajo la mandíbula al realizar su
llamada y desarrolla durante el periodo nupcial pequeñas rugosidades en el
primer dedo de las extremidades anteriores que le ayudarán a sujetarse a la
hembra durante el amplexo.
Se
encuentra en las zonas templadas de Europa y Asia, así como en el nordeste de
África.
Sus
lugares preferidos son los parajes con agua permanente, donde abunda la
vegetación exuberante a los márgenes de charcas, lagunas o ríos de corrientes
lentas.
Frecuenta
preferiblemente árboles, matorrales y otras vegetaciones densas que le permitan
camuflarse y que además estén próximas al agua.
Es
de actividad principalmente nocturna y crepuscular. Al principio de la
primavera permanece en las proximidades del agua, pero en verano y otoño
prefiere instalarse en los arbustos y en los árboles, ya que puede trepar
ágilmente gracias a los discos adhesivos de sus dedos.
Es
totalmente invisible entre el follaje, pues tiene la propiedad de cambiar
rápidamente de color pasando del verde al gris e incluso al pardo, el azul y
hasta amarillo.
A
veces se puede encontrar con manchas. Se alimenta de arañas y pequeños
insectos.
El
acoplamiento tiene lugar en la primavera, utilizando charcas o riberas
fluviales de aguas dulces y con abundante vegetación.
Los
machos atraen a las hembras con su potente canto, hinchando el saco vocal que
llega a adquirir un tamaño mayor que el de la cabeza.
Como
en el resto de especies de ranas, el apareamiento tiene lugar una vez el macho
haya conseguido atraer a una hembra con su llamada y durante la noche. La
hembra deposita paquetes con alrededor de 1000 huevos en racimos, los cuales
son fecundados externamente por el macho, realizando el denominado amplexo
axilar.
Después
de la metamorfosis, las ranitas miden de 15 a 20 mm de longitud.
Salvador
Viadel
Fotografías:
Salvador Viadel y Vicente Estelles
Maquetación:
J. R. Casaña
Etiquetas:
Anfibios,
J. R. Casaña,
Ranita San Antón,
Salvador Viadel,
Vicente Estelles
jueves, 27 de noviembre de 2014
CONNECTA NATURA REPARA LA ACEQUIA DE LA RESERVA DE FAUNA BALSA DE LA PEDROSA EN ALCUBLAS.
Cuando hay buena voluntad y deseo de participar, las
cosas salen muy fluidas, contactamos en Valencia con esta asociación,
explicándoles la problemática de la Balsa de la Pedrosa, subieron a visitarla y
se comprometieron para mejorarla.
Las escorrentías de esta balsa se habían visto dañadas
por los animales que en un principio extrajeron la leña del Monte Pedroso,
afectado por un incendio forestal hace dos años.
Se había obturado la acequia que aportaba el agua que
caía, de la Rocha Miguelé, impidiendo que llegara a la cubeta de la balsa.
Era un trabajo importante, pues además, la extracción
de leña había creado muchas cárcavas en el reguero de la escorrentía, lo que hacía
que el agua arrastrase mas tierra y a mas velocidad.
Quedamos pronto en el pueblo y después de recoger la
herramienta necesaria, que nos facilito el Ayuntamiento de Alcublas, partimos
hacia la Balsa de la Pedrosa.
Algunos ya la conocían y otros no. pero enseguida nos
pusimos manos a la obra, para conseguir el objetivo final que es la mejora de
entrada de agua de lluvia a la Balsa de la Pedrosa.
Formamos tres equipos, acometiendo cada uno de ellos la
tarea que debía realizar como era tapar el boquete que habían realizado en la
acequia las caballerías, dulcificar las escorrentías por medio de
"faginas" , tapar y reconducir el arbellón que recoge el agua de la
rocha Miguele y nivelar la acequia de recogida de aguas, para que llegue a su
destino.
Nos visitaron los concejales Joaquín Sanz y Santiago
Cabanes, para supervisar el trabajo y animarnos a concluirlo.
Poco a poco los trabajos diseñados se iban adelantando,
la ilusión nos dama más ganas de seguir
con ellos.
Había que ir pensando en tomar fuerzas y nos desplazamos
al pueblo a por unos bocadillos reparadores.
Poco tiempo tardamos ya que los bocadillos los habíamos
encargado y solo fue recogerlos.
La mañana había sido fructífera, la mayoría de
objetivos se habían cumplido, en la comida, las conversaciones fueron sobre la
gravedad del incendio forestal que padecimos.
Les enseñamos la biodiversidad de la Balsa de la
Pedrosa, quedando muy impresionados por la cantidad de vida que alberga.
Mientras Connecta Natura hablaba de su proyectos y
futuros trabajos, aproveche para acercarme a los navajos cercanos a la Balsa de
la Pedrosa, el primer intento fue baldío, pues no se podía acceder al Navajos
de la Fuente del Puerco o Sapero, los árboles caídos impedían llegar a él.
Si que visité el Navajo del Collao de Gabarda y el de
Morca, apreciándose vida en el primero, renacuajos de Bufo y Branchipus y agua
en el segundo.
Rematamos la faena y fuimos a visitar la Balsa de la
Mina, pues las últimas pocas lluvias habían arrastrado cantidad de ceniza a su
cubeta.
La obscuridad empezaba a enseñorearse y decidimos dar
por terminada la jornada, prometiéndonos continuar con la labor.
Seguiremos de cerca las mejoras efectuadas, pero solo
nos falta una cosa, quizás la más importante que llueva.
Connecta Natura
J. R. Casaña.
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Balsas de Alcublas,
Connecta Natura,
J. R. Casaña
Ubicación:
46172 Alcublas, Valencia, España
martes, 18 de noviembre de 2014
LA BALSA DE LA MINA DESPUES DE DOS AÑOS DEL INCENDIO FORESTAL SIGUE CON CENIZA
Han pasado dos años del
incendio de Alcublas y paradójicamente, la ceniza sigue estando presente en la
Balsa Silvestre de Alcublas.
La verdad es que los
aportes pluviales a esta balsa son de largo recorrido y muy rocosos, lo que ha facilitado,
por la larga sequia, la permanencia de la ceniza en las rocas.
No ha llovido mucho, pues
no hay mucha agua en su cubeta, pero sus alrededores, si están llenos de
ceniza.
Escalonada y con fuerte
intensidad de color debido a la humedad que ha absorbido por la lluvia.
La observación que
realice, pese a la hora y la poca luz, no me dio mucha esperanza de la
existencia de anfibios en su interior.
Tampoco el color negruzco
de sus aguas, me hace augurar que la presencia, de nuestros queridos gallipatos,
no sea lo abundante que me gustaría.
Debo volver a tomar
mediciones de pH, para volver a valorar si es posible la vida en ella.
Deseo que las lluvias continúen
y vaya entrando el liquido elemento en su cubeta, para mejorar. si es posible,
la calidad de sus aguas.
Así como que volvamos a
disfrutar, de la presencia de los anfibios y demás vida, con la que disfrutaba
antes del incendio.
Los buenos deseos, no
hacen, que la ceniza siga estando presente en esta querida balsa.
J. R. Casaña
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Balsas de Alcublas,
J. R. Casaña
Ubicación:
46172 Alcublas, Valencia, España
sábado, 8 de noviembre de 2014
El Herrerillo Capuchino (Lophophanes cristatus) AVES DE NUESTRO ENTORNO (VIII)
Este pequeño pajarillo que
habita en nuestros bosques tiene una apariencia inconfundible, gracias sobre
todo a su característica cresta triangular y apuntada de plumas blancas y
negras que pliega y despliega a voluntad.
Su cara también es un característico juego de
bandas blancas y negras.
El dorso, las alas y la cola son de color
pardo oscuro que contrasta con los flancos, el pecho y el vientre de un tono
gris- canela muy apagado.
Suele anidar en oquedades
de los troncos, aceptando con facilidad cualquier nido artificial que reúna un
mínimo de condiciones.
Es un ave sumamente inquieta lo que dificulta
enormemente su fotografía.
Esta es un ave sumamente salvaje y
afortunadamente no es apreciada ni por su canto ni por su valor
gastronómico por lo que no es objeto de
caza o capturas de manera intencionada.
Salvador Viadel
Nunca había visto a este
simpático pajarillo. Pero hace un tiempo lo conocí y quedé impresionado por sus
encantos qué con tanto interés, oculta para protegerse. Pasa bastante inadvertido por sus costumbres de estar casi siempre
entre los árboles buscando alimento y al mismo tiempo intentar no ser visto a
miradas que le pueden ocasionar problemas en su seguridad ante cualquier
enemigo.
Es de talla menuda, muy
rápido y de movimientos precisos, de mirada vivaz, y yo diría que inteligente.
Sus ojos pardo rojizos le dan más viveza a su
expresión de pajarillo de aspecto simpático. A pesar de estas condiciones me
parece bastante confiado cuando no detecta peligro, pues acude a posaderos
artificiales si se le pone comida en momentos invernales cuando ésta escasea.
Suele aceptar nidos
artificiales para su reproducción. Permite acercarse bastante al mismo, en los
momentos de alimentar a su prole, lo que resulta interesante para poder
fotografiarlo con cierta “facilidad” no exenta de dificultades, por su rapidez
de movimientos.
Tiene un plumaje que
predomina el marrón en diferentes tonos, con zonas y franjas en el cuello y en
la cabeza de color negro.
Lo más llamativo de su
plumaje es una cresta en la parte posterior de la cabeza que le hace
inconfundible a la vez que gracioso.
Se alimenta de diferentes
insectos, semillas y arañas.
Un pajarillo que como
todos, debemos proteger y conservar.
José L. Sanmiguel.
Pequeña ave insectívora
muy localizable por su cresta de plumas vistosas.
Su hábitat natural suele
ser los bosques de coníferas, encinares y bosques frondosos, habitual y
residente en la Península Ibérica.
Gran parte de Europa lo
alberga de los Urales a Escandinavia y la Península Ibérica.
En las depresiones grandes
y en las zonas desérticas o semidesérticas es muy escaso. Tampoco se encuentra
en los dos archipiélagos.
En Portugal y España se
encuentran dos subespecies: en el centro y norte peninsular mitratus y en la parte suroccidental weigoldi, algo más oscura y pequeña que
la otra.
En las Islas Británicas se
reduce su presencia a bosques de Escocia, donde es residente y no migratorio.
Bastante sedentario,
aguanta en zonas altas si no hay muchos temporales invernales. Su población en
España se sitúa entre 860.000 y 1.5 millones de parejas, según los datos del
Atlas de las Aves Reproductoras de España (2003).
En el año 2000 el cálculo
de población en Europa se estimaba entre 4,1 a 17 millones de parejas. La mayor
población se mantiene en Galicia, Pais Vasco y Cataluña, bosques del Sistema Ibérico,
Montes de Toledo, Sierra Morena, Levante y Murcia.
Su canto es similar al habla
con un constante zee, zee, zee.
Antes se le atribuía el
género Parus, pero ahora se le
incluye en Lophophanes.
Es una especie forestal
beneficiosa para el hombre y los bosques debido al control que ejerce sobre las
plagas forestales, incluyendo la procesionaria del pino, de cuyas larvas se
alimenta. De ahí que sea importante el favorecerla mediante la instalación de
cajas anideras.
Imágenes:
Salvador Viadel y José
Luis Sanmiguel
Fuentes:
Toni Polo
Carlos Micó
http://www.seo.org/ave/herrerillo-capuchino/
http://es.wikipedia.org/wiki/Lophophanes_cristatus
Maquetación:
Rafa Casaña.
Etiquetas:
Aves de nuestro entorno,
Carlos Micó,
J. L. Sanmiguel,
J. R. Casaña,
Salvador Viadel,
Toni Polo Aparisi (SVO)
jueves, 30 de octubre de 2014
Hormiga león (Distoleon tetragrammicus)
Algunas
veces los medios urbanos, nos reservan sorpresas de la naturaleza.
Paseaba por
una calle y de repente se posan mis ojos sobre un insecto enorme, que nunca lo
había vista, me llamo poderosamente la atención.
Contacte
con los entendidos en el tema y me ayudaron como siempre en su clasificación,
se trataba de una especie de hormiga león, que habitualmente se pueden ver de
noche y cerca de puntos de luz, pero era de día.
Seguramente
estaría aturdida y desorientada, por no estar en su medio.
Pertenece
al orden neurópteros y a la familia mirmeleónidos, mide unos 75 mm de
envergadura de alas y tiene dos pares de antenas muy llamativas, que destacan
poderosamente.
Estaba
sobre una pared de mármol y no era fácil capturar su imagen.
Estaba
acompañado de niños y alguno quiso lanzarse a cogerla, aprovechando la ocasión,
para explicarles que no se deben de molestar a los animales y lo buenos que son
los insectos para el ciclo de la vida, quedaron algo convencidos.
Pese a su
agradable estampa en los adultos, las larvas son grandes depredadoras, que
viven uno o dos años enterradas en la arena.
Cuando
percibe la presencia de una presa sale de su túnel para devorarla, con sus
potentes mandíbulas.
Para después
confeccionar un capullo en el que realizara su transformación final.
Debemos de
transmitir, sobre todo a los niños, lo importante que es el ciclo de la vida,
que los humanos estamos tan acostumbrados a romper.
J. R.
Casaña
http://ichn.iec.cat/bages/planes/Imatges%20grans/cDistoleon%20tetragrammicus.htm
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Insectos,
J. R. Casaña
Ubicación:
46172 Alcublas, Valencia, España
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