Grupo de voluntarios que cuidamos la biodiversidad de las balsas de Alcublas

viernes, 21 de enero de 2011

Una colaboración de nuestro amigo Manuel Ambou

 MI ENCUENTRO CON UNAS CHARCAS



Llevo desde muy pequeño disfrutando del campo, del monte, de esa interminable naturaleza.
Mi enorme curiosidad me ha hecho que conozca una infinidad de seres que encuentro en esos diversos ecosistemas por los que transito.
Siempre, en todas mis excursiones he descubierto algo nuevo de esta enorme biodiversidad que nos rodea: plantas o animales.
Y llegó el momento en que tuve la oportunidad de recoger en imágenes todos estos encuentros en mi aventura de la vida.
Más de treinta años muy dedicados a conocer y estudiar, para clasificar, las miles de fotografías que he ido acumulando en mi archivo.
Yo soy de esos que lo fotografían todo. Debe ser un afán de poseer, o de querer inmortalizar todo aquello que me llama la atención. Pero en el fondo mi objetivo siempre ha sido documentarme para poderlo transmitir a los demás.


Bueno: pues con tantos años por esos montes, nunca me había parado, de una forma tan seria, a desentrañar la posible vida que puede existir en una vulgar charca.
Y he aquí que, por suerte, fui a conocer a un personaje interesantísimo, allí arriba, en el Balcón de Valencia, en Alcublas : J. Rafael Casaña.
El me incitó a colaborar con un grupo de amantes de las charcas, que me fueron mostrando la interesante vida que en ellas pululan.
Esto, para mi, ha sido un sorprendente y nuevo descubrimiento, del que no he podido pasar sin mostrar mi acostumbrado interés.
Un curioso tritón el Gallipato; tres seres de extraordinaria vida: crustáceos como el Triops o el Branchipus y un bivalvo desconocido para mi la Isaura, que me dejaron con la boca abierta, cuando me enteré de los detalles de su genial supervivencia.
Pero los seres que pueblan las charcas no se limitan solo a estos cuatro especímenes, hay muchos más, todos interesantísimos, que, como siempre, cumplen una misión en este Planeta de vida.

Aunque mi curiosidad es algo superficial y la investigación se la dejo a los cualificados biólogos, estoy disfrutando mucho con estos inolvidables encuentros en estos ecosistemas, con su sorprendente naturaleza y la compañía de sus cuidadores, ese genial grupo que conocí en la Serranía, comprometidos en un interesante programa de Medio ambiente: “Adopta una charca”.


Un saludo a todos.
¡¡Sois estupendos!!

martes, 18 de enero de 2011

Gallipato herido



Este fin de semana fuimos a revisar las balsas que tenemos apadrinadas: Balsa de la Pedrosa y Balsa Silvestre.
Salimos pronto, el día acompañaba, cuando se fue la niebla, nos alumbro un sol que no es precisamente de estas fechas, así están los almendros, casi empezando a florecer, luego vendrán las heladas.
Fuimos primero a la Balsa de la Pedrosa, tomamos los datos, ya os informaremos y partimos hacia la Balsa Silvestre, el día realmente era maravilloso, hasta casi decir que era demasiado bueno.
En la balsa Silvestre se notaba que hace tiempo que no llueve, ha menguado bastante el agua.


Empezamos a investigar las propiedades de la balsa y de repente que nos aparece un urodelo grande casi los veinticinco centímetros, ya sabéis que Pleurodeles waltl, es nuestro querido GALLIPATO, estaba rodeado de pan de rana, con mucho cuidado lo sacamos de la red y para sorpresa nuestra, observamos que le faltaba un trozo de cola.


Quizás en su correría nocturna había tenido alguna pelea con otro congénere y le había atizado un bocado en la cola, son carnívoros, o tal vez otro animal lo había atacado.

 
Pese a ello tenia fuerza y vigor y lo demostraba sacando sus costillas pinchosas, después de hacerle algunas fotografías lo devolvimos a su hogar para que siguiera recuperándose.