El navajo las Lomas esta situado en la partida de dicho nombre, junto al camino que va al pozo de la Montanera y que a su izquierda tiene el Barranco de Cañas.
Se hizo con un lecho de cemento que la naturaleza ha regenerado convenientemente, se ve en su fondo chara y tambien alguien le ha plantado enea, sus aportes acuíferos son importantes, tambien tiene una goma que sale del abrevadero del Cerro San Martín, para verte el sobrante del chariz, aunque no mana.
La solemos visitar con frecuencia y observamos su evolución, vimos que algún sapo partero había depositado su carga en dicho navajo y efectivamente lo comprobamos sus alevines corrían por ella.
El canto para el apareamiento del sapo partero lo inicia el macho desde su refugio empiezando a cantar al inicio de la primavera, las hembras le responden.
Su cúpula la hace en tierra aunque es bastante compleja, tras estimular el macho a la hembra esta pone una ristra de huevos, que después de ser fecundados por el macho, este se los pone entre el final de la espalda y las patas, teniéndolos sobre el un mes, de ahí le viene el nombre de sapo partero.
Transcurrido este las larvas son introducidas por el macho en el agua, donde rompe la cubierta del huevo y nadan libremente.
Una curiosidad es que el canto del macho es corto y aflautado, muy semejante al de ciertas aves rapaces nocturnas (autillo). Además los machos pueden encargarse de la puesta de varias hembras.
No quedaron aquí las sorpresas, también vimos mudas de ninfas de libélula,
que ya las dimos a conocer el 5 de Julio y que os adjuntamos enlace por si quereís verlo:
Las ninfas para facilitar su crecimiento deben de cambiar su cubierta exterior y esta queda depositada entera en el lugar del cambio.
Varias libélulas habian efectuado este cambio, dejando sus mudas para que nosotros pudiésemos verlas.
Gallipato Alcublano
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